Rendir cuentas en vez de inaugurar
Al acercarse el primer cumpleaños de doña Laura en el poder, le recomiendo que en lugar de invertir su tiempo en inaugurar obras lo haga en exigir cuentas.
Sería bien visto y efectivo si programa oportunamente sesiones públicas en las que sus subalternos en ministerios e instituciones descentralizadas rindan cuentas sobre la relación entre metas y resultados, ejecución de proyectos planeados, conceptualización de nuevos proyectos acordes con la misión y visión de la institución, ejecución presupuestaria, etcétera. Rendidas las cuentas, esperaríamos que ella tome medidas que premien y estimulen a las instituciones efectivas y a sus líderes y, para los chapas o negligentes, no solo medidas correctivas sino sanciones morales y legales.
De conformidad con una noción moderna de Estado, las cuentas se rinden mediante procesos públicos y criterios balanceados, objetivos y analíticos que conllevan consecuencias que estimulan o sancionan y no mediante simbolismos falaces de cortar una cinta de una obra, a veces mal hecha, sin terminar, o antes de tiempo.
Pedro Muñoz
pedro.munoz@liberia.co.cr
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jueves, 17 de febrero de 2011
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